Ju-on 1 (呪怨 1)

Año: 2000.

Género: J-horror.

Director: Takashi Shimizu.

Duración: 70 minutos.

Más información: Ficha en IMDb.

La primera vez que vi esta película acuñé la frase "maldito niño gato" en referencia a Toshio. Hay personas a las que el sonido gutural de un fantasma de la historia, que no quiero desvelar, les da más miedo. Para gustos colores, pero lo que está claro es que esta película da miedo incluso después de haberla visto tres veces.

Takashi Shimizu, responsable de Rinne y Marebito, dio algunos de sus primeros pasos con esta película de V-cinema (un formato muy habitual en Japón en que las películas no son pasadas por el cine, sino que van directas a VHS en este caso o a DVD o Bluray actualmente) en tiempos en que el cine de terror era aún más mal visto que ahora por ser considerado como cine "de segunda". La cosa va mejorando, es cierto, pero el cine de terror adolescente de Hollywood de muchos "sustos" y poca historia no ayuda.

Ju-on tiene una estructura dividida en seis partes en las que juegan su papel tres familias diferentes. Cada uno de esos capítulos tienen el nombre de un personaje: Toshio, el niño protagonista, un extraño amante de los gatos, Yuki, la joven de una familia que habitará posteriormente la casa, Mizuho, la novia del hermano de Yuki, Kanna, una amiga de la joven Yuki a la que ayuda con los deberes, Kayako, la desconocida madre de Toshio y Kyoko, una mujer con sensibilidad espiritual que nota algo extraño en esa casa.

Cada historia está vinculada pero a su vez es independiente. Es una forma muy interesante de narrarla y, a la vez, muy terrorífica, pues nadie se salva. La desgracia acompaña, sobre todo, a Kobayashi, un profesor a punto de ser padre que decide buscar a Toshio pues hace tiempo que no aparece por clase.

Hay dos precuelas, una pareja de cortos vinculados Katasumi y 4444444444. Podemos ver referencias a ellos a lo largo de la película, sobre todo en un número de teléfono que llama a Mizuho que tiene esta cifra tan larga y extraña, ¿qué significará? Hablaremos de ello en otro artículo.

La tensión llega al final pues la historia queda pendiente, parece que la casa deja de estar encantada pero nadie hizo ninguna clase de exorcismo. ¿Habrán parado los fenómenos? ¿Alcanzarían el descanso eterno? ¿Se les agotaría la sed de sangre? O, simplemente, ¿se habrán ido a otra parte? Nos vemos en Ju-on 2.